Después de abordar con precisión la guerra de Iraq y la caza a Bin Laden, Kathryn Bigelow vuelve a llevar a la gran pantalla otro importante acontecimiento de la reciente historia americana de EE.UU. En esta ocasión la acción se centra en el incidente del motel Algiers, durante los graves disturbios raciales de Detroit en 1967, en el que un grupo de fuerzas de seguridad detuvo de manera ilegal y golpeó durante horas a un grupo de personas para encontrar a un supuesto hombre armado en un interrogatorio que se saldó con tres jóvenes afroamericanos muertos y otras 9 personas seriamente heridas.
Con su estilo realista, Bigelow compone un largometraje repleto de tensión que hace que el espectador experimente de primera mano la angustia y desesperación de aquella fatídica noche, a la vez que recupera un hecho histórico que en nuestros días había quedado relegado a la condición de mera nota a pie de página.
El actor John Boyega encabeza el reparto de Detroit, que también cuenta con Anthony Mackie, Jack Reynor, John Krasinski y Will Poulter entre otros.
En el verano de 1967, Estados Unidos era un polvorín. La Guerra de Vietnam y décadas de segregación racial fueron el caldo de cultivo para que las comunidades afroamericanas, golpeadas por el desempleo y la discriminación, provocaran furibundos disturbios en Detroit. Con la ciudad bajo toque de queda, un local es tomado por las autoridades, que interrogan brutalmente hasta encontrar al autor de dos disparos. Al terminar la noche, tres chicos negros habían muerto y no se encontró ningún arma.
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