Estudiar hipnosis terapéutica

La hipnosis terapéutica es una técnica psicológica que utiliza la hipnosis como herramienta clínica para promover cambios en pensamientos, emociones o conductas. Se llama también hipnoterapia y esta herramienta es capaz de lograr un estado de atención focalizada y relajación profunda, en el cual la persona está más receptiva a sugerencias que buscan mejorar su bienestar físico o psicológico.
Hay que dejar claro que no significa una pérdida de voluntad del paciente ya que éste conserva el control y la capacidad de decidir. Además, a la hora de aplicar esta herramienta la ética es esencial ya que nunca debe usarse para manipular ni sustituir un tratamiento médico necesario.
Esta técnica se comienza a aplicar en el siglo XVIII cuando Franz Anton Mesmer desarrolla el “magnetismo animal” y en el siglo XIX: James Braid acuña el término hipnosis. Sigmund Freud la utilizó inicialmente antes del psicoanálisis y el gran referente de la hipnosis moderna es Milton Erickson que logró darle un enfoque centrado en el paciente.
En la actualidad se puede aprender hipnosis en centros especializados. Esta técnica debe ser practicada por profesionales de la salud como psicólogos, médicos o terapeutas con formación acreditada). En España y otros países hay cursos acreditados y asociaciones de hipnosis clínica en las que se dan a conocer de primera mano cuáles son las posibles aplicaciones de esta herramienta. También en estas escuelas se aprende cómo hay que aplicar a los pacientes esta herramienta.
¿Para qué se usa la hipnosis terapéutica?
Lo primero que hay que aclarar es que la hipnosis terapéutica se utiliza como complemento de la psicoterapia o la medicina, nunca como sustituto. Entre sus aplicaciones está su uso para aliviar el dolor crónico en patología como fibromialgia, migrañas o dolor postoperatorio. Se considera que puede ser tan potente como la morfina y puede también reducir los efectos secundarios de la quimioterapia.
También se puede usar para problemas de ansiedad, fobias, estrés o insomnio y otros trastornos del sueño. Y se recomienda en trastornos de la alimentación como la anorexia, la bulimia o la obesidad y también para problemas de tabaquismo u otros hábitos. También se puede utilizar en terapias de sexología.
La hipnosis terapéutica incluye atención focalizada en la que se reduce el ruido mental y sugestión positiva gracias a la que se facilitan cambios de percepción y conducta.
También mediante esta herramienta se intenta que la mente del paciente responda a imágenes y metáforas como si fueran experiencias reales.
El procedimiento básico de la hipnosis terapéutica consiste en primer lugar en la inducción que son un conjunto de técnicas cuyo objetivo es llevar al paciente a un estado de relajación y concentración. El segundo paso es la profundización en esta técnica para aumentar la receptividad del paciente y luego aplicar sugerencias terapéuticas: orientadas al objetivo de la terapia concreto que puede ser reducir el dolor crónico, rebajar la ansiedad o reforzar la autoestima. Para terminar la sesión hay que proceder a lograr el regreso progresivo del paciente al estado habitual de conciencia.