¡Quién pudiera volver a la niñez!… Rastros de bocadillo por toda la ropa; el bigote de helado de fresa o chocolate sobre una sonrisa de dientes de leche que se mueven e, incluso, ausentes; tardes en el parque junto a otros niños, sin importar si hay o no lazos de amistad; cuentos para dormir; lloros que se consuelan con besos y abrazos…. ¡Quién pudiera volver a ver el mundo con esos ojos inocentes y alegres, desde los que el mundo es sencillo!
Mi hermano y yo pasábamos las tardes jugando a batallas, entre disparos, victorias y derrotas. Las horas corrían como los segundos. El momento más solemne era el comienzo del juego, cuando nos adjudicábamos los papeles de bueno y malvado. Nos mirábamos tensos; ninguno queríamos ser el malo. Después de una pequeña deliberación, decidíamos que los dos representaríamos el bien. Por eso, resolvíamos la batalla imaginaria quedando como amigos.
A pesar de lo que acabo de narrar no es más que una anécdota infantil, ofrece cierta moraleja frente a la hostilidad del mundo adulto. Hundidos en nuestros problemas, muchas veces ignoramos los de los de los demás, a quienes catalogamos con una rapidez asombrosa.
Y esto origina tantas equivocaciones, tantos errores, tantos juicios precipitados, tantos prejuicios…, pues adjudicamos el papel de malo del juego a personas que, en realidad, son muy buenas.
Alberto Meneses ha sido galardonado con el Premio Kindle Storyteller 2025 para autores en español…
El Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid, fiel, entre otras perspectivas, a su condición de…
El V Festival de Novela Histórica Ciudad de Tacoronte, organizado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento…
Una de las novedades de este mes de noviembre es la novela El sueño de…
Tras el éxito de Los chicos del coro, sus productores nos traen su nuevo espectáculo, Oliver Twist, el…
Todas las de la ley, el nuevo drama legal de Ryan Murphy, llega en exclusiva a…