‘Athenea y los elementos. El ojo de Nefertiti’ de Jesús Cañadas

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Athenea y los elementos. El ojo de Nefertiti de Jesús Cañadas. Editorial Edebé, 2018. Cartoné, 340 pp., 14 × 21 cm., 14,95 €.

Por José R. Cortés Criado.

Jesús Cañada catalogado como uno de los valores emergentes del género fantástico en España se inicia en el mundo de la literatura infantil con esta primera entrega de una saga de corte clásico cuya protagonista es una niña de mucho carácter.

La trama de la saga girará entre la exploración, la historia antigua y los elementos fantásticos de la sociedad europea del siglo XX, dando rienda suelta a la imaginación para que los lectores vivan aventuras sin fin desde el inicio del libro.

En El ojo de Nefertiti, la trama comienza y finaliza en Berlín, en 1912. De ahí salta a El Cairo donde un viejo arqueólogo busca el ojo de Nefertiti junto a su hija en pleno desierto egipcio.

Cuando abren la tumba de tan singular reina, se suceden una serie de acontecimientos paranormales que acarrean la desaparición de la joven y de una pieza de singular belleza, el busto de Nefertiti.

En vista de lo cual, su marido, un ser despistado que tropieza con todos y con todo decide ir en su búsqueda, por lo que contrata una institutriz para que cuide de su hija Athenea. La señora acude con su hijo, Mehdi, un jovencito otomano tocado con un fez, también algo atolondrado.

Cuando el padre decide viajar hasta El Cairo y dejar a su pequeña a buen recaudo, ocurre algo imprevisto, unas fuerzas del mal atacan la vivienda, fallece la institutriz y los dos jovencitos terminan de polizontes en el barco donde viaja el padre de Athenea.

La joven protagonista no quiere ser una damisela, tiene mucho carácter y no se amedranta ante casi nada; todo lo contrario de su compañero, joven tímido, educado como un caballero prusiano que cuenta con un maletín lleno de inventos suyos que le ayudan a salir de algún que otro apuro; ella suele tomar las iniciativas y Mehdi le sigue, aunque a veces porque tira de su corbata.  

Desde ese momento comienzan a ocurrir fenómenos extraños, aparecen personajes muy disparatados y con no muy buenas intenciones que dotan la lectura de una frenética actividad que no cesa, ya sea viajando en el barco, paseando por el zoco de El Cairo o visitando las excavaciones o la necrópolis donde enterraron el busto de Nefertiti.

Entre maleantes, contrabandistas, espíritus antiguos, poderes mágicos, tumbas, ejecuciones en alta mar, mujer pirata e independiente, bandidos internacionales y estar al borde de la muerte en más de una ocasión transcurre la historia, que tiene un final apoteósico en un museo berlinés.

Conforme avanza la trama los personajes más jóvenes van evolucionando y descubriendo quiénes son en realidad y a qué familia pertenecen. Ambos poseen poderes extraordinarios que hasta ese momento nadie les quiso desvelar, pero las circunstancias hicieron que aflorarán sin ser ellos conscientes de ello.

Al final, cuando parece que todo está en vías de solución, los protagonistas han de enfrentarse a un ser muy malvado, el más peligroso de todos los que aparecieron antes en el libro, se trata de la abuela paterna de la protagonista, la peor enemiga que podían imaginar.

Este volumen atrapa al lector desde su inicio y paso a paso va descubriendo facetas nuevas de los personajes mientras avanzan en la recuperación de la madre de Athenea, poseída por el espíritu de Nefertiti, que no ha podido llegar al más allá y descansar.

Magia, poderes extraños, enigmas sin descubrir, misterios inquietantes, fantasía y ciencia ficción hacen que te sientas preso de su lectura y anheles llegar al final par conocer su desenlace.

Por lo que he leído creo que la saga puede tener éxito, las aventuras se suceden vertiginosamente, algunas escenas y diálogos están cargados de humor, los poderes extraordinarios sacan de apuros a los protagonistas y la fuerza en las investigaciones la  lleva una chica, todo es una buena mezcla para triunfar.

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