Mallorca
Mallorca

Mallorca es una de las islas más hermosas de nuestro país. Un lugar increíble que hay que visitar al menos una vez en la vida. Si estás pensando en visitar Mallorca y solo tienes 2 días, os vamos a dar algunas pistas sobre los lugares imprescindibles  para conocer la isla en tan poco tiempo.

Pero también os vamos a dar un consejo: Para visitar la isla lo mejor siempre es alquilar un coche en el aeropuerto o en el hotel. También os aconsejamos que recurráis al alquiler de coche en mallorca sin franquicia. Os recomendamos recorrer la capital, Palma de Mallorca y visitar algunas de sus calas más hermosas y tranquilas de la isla.

El primer día

Palma de Mallorca siempre sorprende por su belleza y sus monumentos. Una visita obligada es su edificio más emblemático: La Catedral de Mallorca y otros como la lonja de pescado. La “Seu de Mallorca” se empezó a construir en el siglo XIII y está hecha en estilo gótico levantino. Una catedral que impresiona por fuera y también por dentro. Y prepárate para caminar porque hay  215 escalones hasta la parte más alta del templo. La visita suele durar una hora aproximadamente y podrás ver el campanario, las terrazas de los arbotantes o el pasadizo entre las dos torres de la fachada principal.

Si no te apetece visitar Palma de Mallorca, aunque te lo recomendamos por sus monumentos, también puedes aprovechar para visitar las cuevas del Dratch unas de las cuevas más espectaculares y visitadas del mundo.

El segundo día

El segundo día puedes aprovechar para conocer alguna de las calas más hermosas de la isla de Mallorca como cala Mesquida, Cala Mondrago, cala Deià o cala des Moro.

Cala Mesquida está situada a / kilómetros de Capdepera y se encuentra en un paraje natural de dunas y pinares. Una de las calas más visitadas de la isla y donde podrás observar una de las mayores colonias de gaviotas y cormoranes de las Baleares. Además se puede practicar el windsurf, la pesca o el buceo. Cuenta con un aparcamiento gratuito en la zona.

Cala Mondrago es una cala perfecta que está situada en el Parque Nacional Mondrago, y tanto esta como su vecina S’amarador tienen una extraordinaria belleza. Cuentan con chiringuitos para comer y desde allí también te puedes trasladar hasta Portocolom donde tendrás la oportunidad de dar paseo por su puerto o tomar unas tapas en alguno de sus bares.

Cala Deià está  a 10 kilómetros de Sóller, entre Punta de Son Beltran y sa Pedrissa. Se trata de una pequeña cala protegida por altos acantilados que desembocan en pinares. Un lugar precioso en el que la playa es de guijarros y grava y el agua cristalina. Encontrarás un pequeño embarcadero pequeño y unos varios restaurantes donde podrás tomar sus deliciosos arroces y pescados.

Cala des Moro es una playa con un acceso un poco complicado porque para llegar hay que bajar y a la vuelta subir un buen trecho. La belleza de esta cala merece el esfuerzo físico aunque lo mejor es que lleves un picnic porque no hay ni restaurantes ni chiringuitos. Al lado de esta recóndita playa está Cala S’almunia que también es una playa que sorprende por su belleza y tranquilidad.

 

 

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