Cantando en las azoteas
Filmin estrena el próximo 13 de enero Cantando en las azoteas, el emotivo documental que nos descubre a Gilda Love, de 90 años, el último transformista del barrio chino (El Raval) de Barcelona. Con la película, que viene de un corto, el director Enric Ribes está nominado a Mejor Documental en los Premios Gaudí y al Premio Arrebato de No Ficción en los Premios Feroz. Además, Cantando en las azoteas, en cuyo guion participa Isa Campo (Un año, una noche), fue seleccionada en la última edición del festival D’A y se estrenó en cines el pasado 1 de julio.
Ante la atenta mirada de Jesucristo crucificado y de Bette Davis en La Loba, y al lado de un bote de laca Nelly, Gilda Love se acicala para empezar el día. Acto seguido, le vemos junto a su periquito haciendo cuentas para llegar a fin de mes con su mísera pensión y los mínimos ingresos que recibe de trabajar sobre los escenarios. Cuando conoce a Chloe y a su madre, sus prioridades se ven alteradas y, sin forzarlo ni esperarlo, se halla abrazado por la familia que nunca ha tenido.
Mi nombre de bautizo fue Eduardo Enrique Gustavo Francisco, pero nunca me he sentido ninguno de estos hombres. Mis hermanos eran falangistas. Tenía la vida destrozada. Pero en el transformismo y el espectáculo underground de Barcelona, Gilda encontró una forma de escapatoria y de entender la vida. Explica también que nació gemelo de una hermana que murió estrangulada por su propio cordón umbilical y que, fruto de esta tragedia, heredó su personalidad femenina, lo que le llevó a ser Gilda de noche.
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