Entrevista a Octavi Pina, autor de ‘Almas durmientes’: “Para mí, la escritura es un oasis”

Aunque se dedica al mundo de la contabilidad y trabaja con números, Octavi Pina (Barcelona, 1990) reconoce que lo que de verdad le fascina es ejercitar la imaginación. Crear un mundo que no existía donde solo había un papel en blanco es un acto casi de magia, un vergel en mitad del desierto de cotidianidad. Y no deja de ser curiosa la forma tan poética en que habla de su pasión por las letras, porque luego sus obras, como es el caso de Almas durmientes, no escatiman en escenas que ponen los pelos de punta al lector.

P. Como escritor, apuestas por el diálogo más que por las descripciones, cuéntanos qué consideras que le aporta a la historia este sistema.

R. Los diálogos aportan más velocidad a la trama. En cambio, las descripciones realizan el efecto contrario. Como a mí me gusta la acción, necesito más diálogos que descripciones. Me siento más cómodo escribiendo así.

P. ¿Qué crees que es lo que más puede atraer al lector de Almas durmientes?

R. Los giros inesperados durante la trama. Creo que buscan sorprender al lector, y a los amantes del género les encanta las sorpresas. Aunque es verdad que cada vez es más difícil conseguirlo.
Otro elemento sería la personalidad tan humana de los personajes con sus virtudes y defectos. No son héroes, son personas corrientes que se encuentran con problemas reales. El lector se identifica más con este tipo de personajes.

Y, por último, un final impactante y sorprendente. El final de la historia siempre cuadra con los sucesos y tramas del libro, pero logran impactar en el lector. Para ser un buen final debe sorprender al lector para que no adivine de ninguna manera el desenlace.

P. ¿Por qué dirías que el thriller es un género que gusta tanto a los lectores?

R. Porque los lectores buscan entretenimiento y acción. El thriller ofrece estos dos elementos. Al final, este género es muy visual, es decir, se acerca mucho a una película o serie, y eso les encanta a los lectores. Hoy en día, sobre todo los jóvenes quieren vivir experiencias rápidas. Si son historias largas y tediosas, aburren al público y este desconecta de la trama.

P. Almas durmientes tiene una portada muy llamativa. ¿Cuánto te fijas en la portada a la hora de decantarte por un libro?

R. Bastante. La portada es el primer elemento visible en un libro. Debe ser impactante, llamativa. Si, además, es un libro publicado únicamente en Amazon, aún más, porque solo se ve un cuadradito muy pequeño. Con ese espacio debes atraer al lector.

Aparte de la portada, el otro elemento fundamental es la sinopsis. Cuando tienes el libro en la mano, lo giras para leer la sinopsis. Así que esta tiene que estar muy bien trabajada.

P. ¿Consideras que este es tu mejor libro hasta el momento?

R. Sí, sin duda. Hay una evidente evolución en este tercer libro. Los dos primeros sirvieron de entrenamiento; este es el mejor. A ver si me explico bien. Yo nunca había escrito antes ningún relato ni redacción, así que me lancé a la piscina directamente con mi primera novela. Y creo que salió bastante bien, aunque había varios detalles por pulir.

Una vez publicada la tercera novela, me quiero superar en la próxima, ya que hay margen de mejora.

P. ¿Quién es el mayor apoyo que tienes como escritor?

R. Mi pareja y mi hermano. Son mis mayores críticos, tal como he comentado otras veces. Además, ocupan una parte muy importante en los agradecimientos. Mi pareja es mi primera lectora de todos mis escritos.

P. ¿Qué libro citarías como un imprescindible en tu mesita de noche?

R. La caída de los gigantes, de Ken Follett. Me encantó este libro de ficción histórica, mi otro género favorito. Muchas veces cito esta obra, pero para mí es muy importante en mis inicios como escritor. Me ha aportado muchos elementos positivos.

P. ¿Estás cómodo autopublicando o te gustaría que una gran editorial se fijase en ti?

R. Los dos métodos son buenos, aunque evidentemente me gustaría mucho que una gran editorial se fijara en mí. Eso sería sinónimo de tener una buena historia entre manos.
También es verdad que mi última experiencia con una editorial fue nefasta, y eso me impulsó a autopublicar mi tercera novela.

P. ¿Qué consideras lo más complicado a la hora de llegar a los lectores?

R. Marcar la diferencia entre tantas historias excelentes. Con tanta variedad de libros, es complicado despuntar. Encontrar ese elemento exacto para que los lectores se enganchen a la trama. La competencia es sana porque te obliga a sacar lo mejor de ti.

P. Del proceso de escritura de tus libros, ¿qué es lo que más disfrutas?

R. Todo. Poder crear e imaginar historias me hace desconectar de mi día a día. Es impresionante donde te puede llevar la imaginación. Yo me dedico a la contabilidad y estoy todo el día rodeado de números. Para mí, la escritura es un oasis.

Si tuviera que elegir un momento del proceso sería el inicio. Justo cuando empiezo a escribir el esquema, los resúmenes de los capítulos y la estructura de la novela. La criatura va tomando forma y es un momento muy especial. Y, también, cuando escribo la palabra FIN. Ese momento de felicidad es indescriptible.