Por José R. Cortés Criado.
.
Concha López Narváez y Rafael Salmerón llevan a los pequeños lectores a reinterpretar los cuentos infantiles tradicionales, dándoles un nuevo giro e incluso vacaciones a los personajes..
La trama se inicia con Caperucita y el Lobo Feroz, personajes archiconocidos, la niña se presenta contenta y feliz, temerosa del lobo y sin ganas de ir a ver a la abuelita ni ponerse la dichosa capa ni ir a visitar a su abuela con la cestita ni….
Caperucita temía la presencia del lobo, pero quien se cruzó en su camino era un joven moreno, bromista y pastor de ovejas, el que gritaba que viene el lobo para reírse de los otros pastores, y la niña le propone caminar juntos; más tarde se les unieron los tres cerditos, los siete cabritillos. Todos iban asustados y cuando llegó el lobo, este se puso muy contento porque tenía a todos los personajes de sus cuentos juntos y se iba a dar un festín..
Pero los doce se envalentonaron y le hicieron frente, el lobo huyó despavorido a lo alto de un árbol, después descubrió que le gustaba cantar y junto a un gallo, un burro, un gato y un perro, los músicos de Bremen, formó un conjunto musical de gran éxito y pronto acudieron otros personajes de cuentos a escucharlos, como Pulgarcito, Hansel y Gretel y Cenicienta…., pobre príncipe que se quedó esperando en palacio a Cenicienta. El príncipe se aburrió muchísimo, no bailó con nadie, ni encontró un zapato en las escaleras, ni escuchó doce campanadas, ni se enamoró, pero la culpa fue suya, no quiso arriesgarse a cambiar de vida y él se lo perdió..
También Blancanieves estaba cansada de cuidar de los siete enanitos, estos de estar todo el día bajo tierra cavando, la madrastra de ser mala y un día decidieron hacer vacaciones, se tomaban el día libre, cada uno haría lo que quisiera; a estos se unieron el Príncipe Azul, la Bella Durmiente, Garbancito y personajes de cuentos rusos, indios, españoles, ingleses…
Pero hubo quienes no quisieron cambiar de cuento ni tomarse vacaciones como el Príncipe, el Patito Feo, la Ratita Presumida o el Soldadito de Plomo..
Concha López Narváez y Rafael Salmerón hilvanan una bonita historia que invita a la reflexión y a la imaginación, llevando a los pequeños lectores a distintos escenarios donde se mezclan personajes de cuentos diversos y problemas similares. Al finalizar los autores invitan a los lectores a cambiar los cuentos populares y darles vacaciones a sus personajes de vez en cuando..
Es una recreación escrita con gracia y alegría que gustará a los pequeños lectores ávidos de cambios en la vida cotidiana.
.
Esta semana os recomendamos la nueva novela de Mayte Esteban La lectora de Bécquer que…
Si una de las ilusiones que tienes es estudiar el grado de Historia, Geografía e…
Una ovejita de Julia Montoro –Una ovejita, dos ovejitas, tres ovejitas… cien ovejitas… trescientas veinte…
Imagina por un momento estar en un pequeño pueblo donde todos se conocen y donde…
Los hijos del Justo es la ópera prima del escritor andaluz Fran Ortega, una novela…
En Enérgicos tonos ocres y otros relatos, Carlos A. Alarcón Castellanos se revela como un maestro…