La almohada, una de las claves para un buen descanso
Elegir una buena almohada, es tan importante como un colchón. Si por las mañanas te despiertas con dolor en el cuello o los hombros, puede ser que la almohada que usas no sea la más adecuada. En ese caso no te va a quedar más remedio que elegir otra almohada.
El secreto para lograr un buen descanso según los especialistas es que la cabeza, el cuello y la columna vertebral estén alineados. La almohada debe ayudar a conseguir una postura cómoda para la columna. Como esta postura se logra que los músculos se relajen y el cuerpo pueda descansar. También contribuye a tu descanso que el colchón sea el más adecuado y que puedas respirar toda la noche.
La almohada perfecta no existe pero hay elegir aquella que se ajuste a nuestros hábitos de sueño. No es lo mismo dormir de lado que boca abajo o para arriba. También hay que tener en cuenta la complexión física de cada persona como cuando elegimos un colchón. Elegir la mejor almohada es fundamental para lograr un descanso reparador.
Otra clave importante a la hora de elegir almohada es que la anchura de la misma supere la de tus hombros. Un buen truco para garantizarse un buen descanso.
También es importante elegir bien el grosor de la almohada. Si duermes boca abajo lo mejor es una baja de no más de 10 cm. Estas almohadas son también adecuadas para los niños. Aunque si duermen para abajo lo mejor seguro será dormir sin almohada.
Los que duermen hacia arriba deben elegir una almohada de 12 o 13 cm. y de dureza media. Sin embargo los que duermen de lado necesitarán una almohada medio-alta de unos 15 cm. Así lograrán mantener la cabeza y el cuello bien alineados con el eje de la columna y que su cuello no sufra con esta postura.
En cuanto al relleno podemos encontrar en la actualidad almohadas de pluma, las almohadas de látex, las con relleno sintéticos o de espuma. Las de de pluma y plumón de oca o de pato suelen ser bastante blandas y no sujetan el cuellos. Son buenas para los que duermen para abajo. No es adecuada para los alérgicos y las personas que se mueven mucho por la noche.
Las almohadas de látex sin embargo ofrecen una buena sujeción de la cabeza y resultan muy adecuadas para los que duermen de lado. También para los alérgicos a los ácaros. Las almohadas con rellenos sintéticos de fibra de poliéster transpirable son muy blandas e ideales para niños, personas con alergia y con poco peso.
Las almohadas de espume suelen tener efecto memoria y durante unos segundos mantienen la forma de cabeza y cuello aunque se cambie de postura. Esta almohada es apropiada para personas que duermen de lado y que se mueven mucho por la noche.
Por último te recomendamos que cuides bien la almohada para que te dure más tiempo. Por ejemplo aireándola todos los días, dándole la vuelta a menudo e utilizando una funda de protección lavable incluso compra una almohada lavable.