Leyes, autobuses y palabras de María Saldaña. Ganadora de la XVI edición www.excelencialiteraria.com
Gut es estudiante de Derecho. Las leyes son lo que más le gusta. La estabilidad de las leyes, aclaro. Por eso siempre va con un ejemplar de la Constitución bajo el brazo. Parece que se aferra a ella.
Gut estudia y vive en la estación de autobuses, en un eterno ir y venir, de bus en bus, sin quedarse mucho tiempo en ningún destino. Los viajeros lo conocen bien; es el muchacho al que le tiemblan las manos, pues nunca descansa. Para Gut todo es movimiento mientras estudia leyes.
Gut habla mucho, y cuando alguna de las barbaridades que suelta causa impacto, desconcierto, sonríe satisfecho. Le gusta ver a los demás tratando de agarrarse a algo estable mientras él se deshace como la arena entre las manos por culpa de sus comentarios. Disfruta al comprobar que no hay nadie capaz de alcanzar su mente, de comprender cómo es, quién es. Por eso habla tanto; para confundir a quien le escucha. No sabe que ha terminado por no distinguir lo que está en su cabeza de lo que dice. Gut se ha vuelto palabras, palabras y más palabras.
Gut sigue en la estación de autobuses, aferrado a su ejemplar de la Constitución, habla que te habla mientras anhela, sin saberlo, la estabilidad de las leyes.
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